jueves, mayo 24, 2007

El futuro de Los Verdes

La caza está fuera del debate político. No se me ocurre que, a corto o medio plazo, algún programa electoral le pueda dedicar al fomento de la caza más de un párrafo, además muy genérico y para no quedar mal con nadie. En cambio, estoy absolutamente convencido de que están al caer no uno sino varias propuestas políticas contrarias a nuestro deporte. Los cazadores somos muchos, sí, pero desorganizados. En cambio, los ecologistas no se sabe cuántos son, porque su actividad no requiere licencia, pero hacen mucho ruido.
Más pronto que tarde, Los Verdes será una fuerza con cierto peso en España. Basta mirar a nuestro alrededor y así descubriremos que cuentan con 51 diputados en el Bundestag alemán, sobre un total de 614; que en Italia ocupan 16 de los 630 escaños de la Cámara y que en Suecia copan 19 de los 349 sillas del Riksdag. En Francia, Los Verdes tienen sólo 3 escaños sobre 577, pero esto es debido al sistema de elección por circunscripciones. En la primera vuelta de las legislativas de 2002 el partido Verts obtuvo 1,1 millones de votos y en la segunda 678.000, prácticamente los mismos que el Partido Comunista que, por acumular sus votos en pocas circunscripciones o provincias, logró 21 diputados.
En España esto no es así, todavía. En el Congreso de los Diputados hay un solo diputado de Los Verdes. Se trata de Francisco Garrido, el secretario general de dicha formación en Sevilla, que concurrió a las generales en la lista del PSOE, por un acuerdo puntual. Lo cierto es que después de tres años se siente ninguneado por sus propios compañeros del grupo socialista.
Opino que pronto se producirá un cambio y Los Verdes asumirán un papel de mayor peso, en consonancia con el resto de Europa. Lo creo así por tres factores, fundamentalmente: el primero, que han logrado desvincularse de IU, que tiene un proyecto más comunista que ecologista; el segundo, la diversificación de las opciones de izquierdas ajenas al PSOE, con el estancamiento y la desfragmentación de IU; el tercero, la concienciación o el miedo ciudadano sobre el cambio climático y sus efectos.
Su propuesta tiene mucho que aportar al espacio político, pero se corre un riesgo serio: que alguna fuerza mayoritaria, impelida por la necesidad de sumar votos para gobernar, les firme un cheque en blanco y patente de corso para perseguir la caza. Por eso quizá sea ahora el momento para andar despiertos.

domingo, mayo 13, 2007

Apuntes desde el volante

Buena parte de mi trabajo consiste en la observación. Un periodista debe ser ante todo una persona con los ojos abiertos y uno lo intenta, aunque a veces, lo admito, pasan las noticias por delante y sin que uno sea capaz de cazarlas. Ahora que lo pienso, el periodista y el cazador tienen muchas cosas en común. Habrá que escribir algún día de ello.
Y cuando viajo intento ser fiel a esa costumbre observadora. Desde el coche los campos no es que se divisen bien, sino todo lo contrario, pero una reciente ruta desde Sevilla a San Sebastián pasando por Extremadura, Madrid y las dos Castillas me ha servido para obtener los siguientes datos.
Ni una sola perdiz avistada. Un conejo a la altura de Lagartera. Mucha rapaz de Sevilla a Cáceres y mucha urraca en adelante. Por Burgos preciosos campos para soñar cazando detrás de un perdiguero cazallo. Y en el País Vasco verde, mucho verde, y bosque, mucho bosque. Setter.

miércoles, mayo 02, 2007

Niveles 'óptimos' de perdiz y conejo

La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía califica de «óptimos» los niveles de densidad de perdiz y conejo en el territorio andaluz, tras el último censo de febrero. Según estos datos, las densidades medias en Andalucía son de 49,40 ejemplares por kilómetro cuadrado y 13,01 conejos.
Afirma la Consejería —en una nota que acaba de ser remitida a la prensa— que las poblaciones de caza menor en Andalucía continúan el proceso de recuperación iniciado en 2003 y que el aumento de ejemplares hace esperar con optimismo el periodo reproductor de mayo y junio.
La campiña de Cádiz es la comarca con mejores poblaciones de conejos de Andalucía, si bien en general la especie se ha recuperado en un 65% del territorio con respecto a los datos del año anterior. Almería, Cádiz, Málaga, Huelva y Sevilla son las provincias en las que ha aumentado la población de conejos. Es cierto que también en Córdoba esto ha sucedido, pero el incremento no es generalizado sino localizado en la campiña del Guadalquivir. En Jaén y Granada las poblaciones han decrecido, aunque en la primera de ellas el dato apenas es significativo.
En cuanto a la perdiz, Sevilla y Cádiz son las provincia de mayor abundancia. En esta especie el incremento es más acusado, debido a los malos datos registrados en 2005, fundamentalmente a causa de la primavera «extremadamente seca», según la Junta, de hace un año.
La Consejería de Medio Ambiente se muestra muy optimista. Ahora sólo hay que esperar que los datos, efectivamente, se corroboren durante nuestras salidas al campo.