viernes, junio 15, 2007

El 8 de julio empieza

El 8 de julio se iniciará la temporada de caza en Andalucía, con el comienzo del periodo hábil para el conejo. Se podrá cazar con perros desde el 15 de agosto —ahí empezará servidor a echarse al monte— y hasta el 9 de septiembre.
A la espera de que la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, la rubrique de su puño y letra, la Orden General de Vedas de Andalucía para la próxima temporada apenas contempla novedades con respecto a la anterior que, por otra parte, apenas contemplaba modificaciones sobre la precedente y así hasta hace varios años. Aunque aún no son oficiales, pueden fiarse de estos datos.
La temporada general en sí irá desde el 7 de octubre al 30 de diciembre para la perdiz roja y sólo hasta el 2 de diciembre para el conejo, con posibilidad de prolongar varios días el periodo hábil en aquellas zonas con daños en los cultivos.
Son los datos más generales, creo que los que más interesan a los practicantes de la caza menor: el inicio y el término de la media veda y la temporada general. Por cierto, que sí puede haber una modificación importante, pero atañe a la becada. ¿Becadas en Andalucía? Alguna dicen que hay, pero convendrán conmigo en que es algo irrelevante.

miércoles, junio 13, 2007

'Vida sostenible'

No decimos aquí que el cambio climático sea una farsa, no. Sostenemos que se ha convertido en la excusa perfecta para que nuestros gobernantes nos tengan embobados y jueguen al despiste. Me parece cinismo puro o puro cinismo, como quieran, que el G-8 se rasgue las vestiduras a cuenta del cambio climático y no dedique una sola palabra, una sola línea, una sola letra a la pobreza, por ejemplo. Nada nos queda de aquellos tiempos en los que el principal problema del mundo era acabar con el hambre y se tomó Etiopía como referente. No me cabe la menor duda de que los poderosos han hecho de la solidaridad y la buenhomía un gran negocio. Eso es lo que de verdad me fastidia y lo que me enerva. ¿Cuántos concejales de ayuntamientos de España tienen coches oficiales de gran cilindrada que contaminan el triple que otro cualquiera y, en cambio, tienen la desfachatez de reprochar a sus convecinos que no utilicen el transporte público? Permítanme, pero me parece a mí que el que denuncia esto no es precisamente el demagógico. Desde que me levanto hasta que me acuesto, todos los días, trato de hacer todo lo posible por conservar este planeta. Cosas simples, sencillas, de las que habría que convecer a todo el mundo, como cerrar el grifo cuando te lavas los dientes; no dejar ningún electrodoméstico con el led encendido; me ducho en vez de bañarme, enciendo el aire acondicionado cuando es necesario y nunca más ni menos de 25º; todas las bombillas de casa son de bajo consumo; todos los electrodomésticos son triple A; no hay un solo grifo que gotee; y tengo guardados desde que comenzó el año 38 bonobuses agotados, 38, que son 380 viajes. Se puede hacer más, por supuesto, y habrá muchas personas que hagan más, por supuesto también. Cambié el coche por la moto, porque acorta los desplazamientos y emite menos CO2, pero ayer me traje la bici del pueblo, la vieja Orbea Sierra Nevada de los años 80, porque por poco que haga bueno será, y habrá que sacar rendimiento a la pasta que se ha gastado mi Ayuntamiento de Sevilla en una red de carril bici. Si todo el mundo se concienciara de ello, de hacer nuestra vida cotidiana más sostenible (los expertos aún no se han puesto de acuerdo sobre qué es sostenibilidad, pero bueno, ustedes me entienden) seguramente nos iría un poco mejor. Pero lo que exijo y reivindico es que los que nos meten miedo sean los primeros que se apliquen el cuento. ¿O para qué quiere ese mismo político un cochazo de 250 caballos?

martes, junio 05, 2007

Miedo Ambiente


No crean que me han bailado las letras, porque no es una errata. La celebración del día mundial del Medio Ambiente consiste en prevenirnos de lo que se avecina: el cambio climático. Una cosa horrible debe de ser ese cambio climático, sin duda. Pero también un eslogan fantástico para la clase política que nos gobierna. El otro día, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, ya dijo que uno de los objetivos más importante del Ayuntamiento de Sevilla en los próximos cuatro años será la lucha contra el cambio climático. Como se imaginarán ustedes, en Sevilla no tenemos problemas de tráfico, ni de limpieza, ni de seguridad ciudadana... por no hablar del paro o del despilfarro del dinero público. Eso aquí no existe, así que vamos a combatir el calentamiento global.
Hoy, en el día mundial del Miedo Ambiente nos acojonan desde todos los frentes. Dentro de equis años nos vamos a freír de calor por las calles, nos vamos a morir de sed, nos vamos a congelar en invierno, nos vamos a ahogar por la crecida de los ríos y los mares... Hay que poner remedio. Nos acojonan, decía, y al final la solución consiste en crear una comisión de estudio con cinco o seis que cobran una pasta por decir lo que todos sabemos y reunirnos para acordar cuándo nos volvemos a reunir. El cambio climático, aparte de un eslogan es también un negocio.
Y yo pregunto a los señores que nos meten miedo: ¿Qué hace usted por conservar el medio ambiente? Lo que yo hago se lo contaré mañana, para llevar la contraria.

sábado, junio 02, 2007

Cazada en la red

Alexander Klein, fotógrafo de la agencia Efe destacado en Roland Garros, ha captado esta curiosa y bonita imagen. El fotoperiodismo es un oficio duro y complicado. Los ojos siempre abiertos, la mirada limpia y el índice siempre dispuesto a apretar el gatillo nada más encararse. ¿Les suena de algo, amigos cazadores? La imagen -y esto no es un tópico- habla por sí sola: excesiva tranquilidad, quizá aburrimiento, en la pista. Y nosotros, los cazadores, le hallaremos también otro mensaje, otro doble sentido: la paloma cazada en la red. Excelente.